
La incorporación de la seguridad y la salud en el trabajo en las nuevas tendencias empresariales, como la ciberseguridad y la contratación por vía telemática, ha aportado ventajas a las empresas y los trabajadores.
Los costes mundiales en materia de ciberseguridad alcanzarán los 10,5 billones USD de aquí a 2025. Aunque el robo de datos importantes constituye la principal preocupación, los ciberataques también pueden poner en peligro a los empleados. Entre los riesgos figuran los hackeos que controlan malintencionadamente los procesos de producción o atacan los robots industriales y los vehículos autónomos. Por lo tanto, las empresas que evalúan su exposición a las ciberamenazas deben tener en cuenta también los nuevos riesgos emergentes para la seguridad y la salud de los trabajadores.
Mientras tanto, la digitalización está cambiando el futuro del sector de la contratación, la forma de buscar trabajo y las expectativas de trabajadores y empleadores. Más recientemente, la protección de los trabajadores frente a la COVID-19 ha puesto de relieve la importancia de las políticas de seguridad y salud en el trabajo para atraer a nuevo personal.
Fuente: OSHA