Imagen: AFP.
Miembros de la comunidad LGBTTTI temen ser despedidos o sancionados sus preferencias sexuales.
La encuesta “Diversidad y Talento LGBTTTI en México” brinda un panorama sobre el tema. Según los resultados preliminares de este estudio, 54% de las personas de la comunidad lésbico, gay, bisexual, transgénero, trasvesti, transexual e intersexual, temen a la discriminación. En consecuencia, ocultan su identidad de género. Principalmente, por miedo a las represalias.
Este estudio lo ha realizado la Alianza por la Diversidad e Inclusión Laboral (ADIL) y busca generar una perspectiva en torno a los problemas que enfrentan estos grupos de la sociedad. Además, los datos disponibles en la página de internet de la organización, también analizan el desempleo. Al respecto, arrojan que las personas trans son el sector más grande de la comunidad que carece de empleo. De ellos, 39.5% se encuentra trabajo. Además, solo 29.1% cuenta con un trabajo.
En México quienes forman parte de la comunidad LGBTTTI (Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transgénero, Travestis, Transexuales e Intersexuales) enfrentan un mayor número de obstáculos para obtener un trabajo digno y bien remunerado.
En el marco del Día Internacional del Orgullo LGBTTTI, Ophelia Pastrana —mujer trans— explicó para Newsweek en español que uno de los problemas más graves en el mercado laboral es que “hay pocos trabajos, muy mal pagados y con mucho maltrato”. Para ella, la violencia y discriminación que vive una persona LGBTTTI en la escuela y la familia repercute en su desarrollo.
¿Qué problemáticas enfrenta este sector de la población mexicana?
En 2015, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) realizó el estudio “Violencia contra Personas Lesbianas, Gay, Bisexuales, Trans e Intersex en América”. Al respecto, destacó que “la violencia, los prejuicios y la discriminación prevalecen en la sociedad. También, en el interior de la familia. Como resultado, disminuyen las posibilidades de las mujeres trans de acceder a educación, servicios de salud, albergues seguros y al mercado laboral formal. La situación también los hace más susceptibles a diferentes tipos de violencia”.
Datos del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) también tienen registro de actos discriminatorios. En México, uno de cada diez casos de discriminación laboral, entre 2011 y 2017, tuvieron como origen la identidad de género. Francisco Robledo, socio fundador y director de ADIL, sostiene que “cuando las personas tienen que fingir algo que no son y viven con miedo. Principalmente, a ser juzgados, discriminados y no incluidos. Como resultado, se generan caídas de productividad y falta de amor a la camiseta, lo que genera un aumento de rotación [de personal]”.
¿Cuáles han sido los logros en la lucha contra la discriminación?
Este 28 de junio se celebró en México el Día Internacional del Orgullo LGBTTTI. Ahora, se cumplen cuatro décadas de este movimiento en el país. Su lema principal fue: “Cuarenta años viviendo en libertad ¡No renunciaremos!”. Kenlly Pacheco, vocero del comité organizador, destacó los logros obtenidos como la aprobación del matrimonio igualitario y el reconocimiento de la identidad de género. El objetivo ahora es ampliar “los derechos que aún faltan”.
Uno de los rubros más vulnerables en la comunidad se encuentra en el mercado laboral. Por ello, la marcha 2018 definió como objetivo principal el fortalecer la visión de diversidad e inclusión en el trabajo. Así lo indica Pacheco: “A lo largo de todos estos años sigue siendo una de las demandas más importantes porque hablamos de trabajos bien remunerados y dignos”. La comunidad LGBTTTI se desarrolla, en su mayoría, en empresas privadas con 61.3%, según ADIL. En el sector público, se encuentra 23.8% mientras que en la economía del tercer sector (asociaciones y fundaciones) trabaja 4.6%. Solo 8.3% se ocupa en el sector informal.
Beneficio para empresas
Según Francisco Robledo hay un problema importante. Éste es que “no sabemos hablar de estos temas porque nadie nos ha enseñado. Por eso, se debe reeducar a los adultos en los espacios laborales”. Además, agregó que las empresas, desde sus códigos de ética carecen de políticas de no discriminación. En síntesis, es muy difícil que exista confianza para dar pasos hacia adelante”.
En 2017, ADIL y Human Rights Campaign, entregaron la certificación HRC Equidad MX 2018 a 32 empresas. La finalidad de esta certificación es que las empresas transformen la conversación interna y trabajen con sus empleados en una sociedad incluyente. Para ello es necesario cubrir tres rubros. Uno referente a políticas de no discriminación claras. En segundo lugar, que haya un compromiso institucional y responsable de velar por el cumplimiento de estas políticas. Finalmente, se reconoce un compromiso social y visibilidad pública dividida en acciones de mercadotecnia, filantropía y atracción de talento.
La encuesta de ADIL refleja que el ingreso del 41% de las personas es menor a los 10,000 pesos. Solo 30% percibe de 10,000 a 30,000 pesos mensuales. Los candidatos a ser consumidores del llamado pink market son el 14% de la población. Tienen ingresos de 20,000 a 30,000 pesos y solo 15% dijo tener ganancias mayores a los 30,000 pesos.
Para el director de ADIL, las empresas están diciendo: “Esta es la manera correcta de trabajar. Si tú quieres hacerlo en un lugar donde te sientas libre y conforme con quien eres voltea a vernos y quizá quieras trabajar con nosotros”.
En México, existe la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación. Sin embargo, es una ley conciliatoria y no penal. Francisco Robledo señala que la falta de un marco legal que respalde a la comunidad. Para él, se trata de una gran deuda de los senadores y diputados. Afirma, “en México lo que no está penado está permitido”.
Fuente: Newsweek en español.