La industria alimentaria abarca diversas actividades asociadas con el manejo y tratamiento de productos comestibles.
La industria alimentaria presenta riesgos específicos que requieren precauciones especiales. A grandes rasgos, se trata de un conjunto de actividades dirigidas al tratamiento, transformación, preparación, conservación y envasado. Comúnmente, se asocia con el aprovechamiento de materias primas de origen vegetal o animal. Asimismo, agrupa la explotación agraria, ganadera y pesquera. Debido a su amplio alcance, es indispensable contar con manuales y referentes técnicos para que sus trabajadores eviten accidentes o padecimientos. Bajo esta idea, en la presente entrada te compartimos la presente guía: Riesgos específicos y su prevención en el sector…Industria alimentaria. Éste fue desarrollado por el Instituto de Seguridad y Salud en el Trabajo de Valencia.
El objetivo de este documento es dar a conocer los principales riesgos laborales identificados en el sector de alimentos. Además, considera aquellas situaciones que pueden aparecer durante el proceso productivo. Mediante la aplicación de las medidas y el desarrollo de actividades preventivas, se pueden evitar errores comunes en este tipo de espacios laborales.
La diversidad de accidentes posibles en la industria alimentaria dependen de las labores del trabajador.
Los principales temas que se retoman en esta guía son las caídas, los atrapamientos, los accidentes con herramientas y el manejo manual de cargas. Además, se consideran los trastornos músculos esqueléticos que implican las posturas forzadas y el trabajo de pie. De esta forma, comprende un documento completo donde se incluye tanto ergonómica como seguridad y salud ante posibles accidentes. Relacionado con este último punto, se abarcan las condiciones adecuadas para prevenir incendios, explosiones y daño por manejo de sustancias químicas.
A pesar de que el documento fue editado en España, los riesgos laborales del sector son similares en distintas naciones. Debido a ello, se puede ajustar a las necesidades de cada entorno. La finalidad es que el personal se desenvuelva en espacios seguros e higiénicos. En tal sentido, se consideran las actividades productivas, las cuales se podrían dividir en las siguientes etapas:
- Transformación.
- Preparación.
- Conservación
- Envasado de productos alimenticios.
A partir del reconocimiento de estas funciones, se pueden jerarquizar los riesgos. Así, se llega a la determinación de las actividades prioritarias para prevenir. Te invitamos a consultar el documento completo en la siguiente liga:
https://www.aepsal.com/wp-content/uploads/2015/02/MB-industria_alimentaria-INVASSAT.pdf