En el estudio sobre las experiencias de éxito en seguridad vial en América Latina y el Caribe, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) incluyó tres casos de México en el rubro Infraestructura y legal-institucional
El primero de ellos es el programa de Auditorías de Seguridad Vial (ASV), impulsado por el Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes y el Instituto Mexicano de Transportes.
Se trata de realizar auditorías en tramos urbanos, escuelas y carreteras, cuya metodología no se circunscribe simplemente a los aspectos geométricos de la vía sino que va mucho más allá, con la verificación de criterios de seguridad para todos los usuarios en las diversas fases de los proyectos; planificación, diseño, construcción y puesta en servicio.
Para complementar el programa se impulsa la formación de Auditores en Seguridad Vial cuyas funciones son trabajar en los puntos rojos o conflictivos de mayor siniestralidad y proponer soluciones prácticas en cuanto a señalización, flujo de vehículos y peatones y con una perspectiva integral de la movilidad humana.
Se ha demostrado que estas auditorías contribuyen en forma favorable y efectiva a la disminución de la accidentalidad vial.
La fortaleza de este programa es que representa un primer paso para la implementación de un sistema de realización de inspecciones y auditorías de seguridad vial en el país, con varias aplicaciones prácticas realizadas por auditores formados y capacitados para ello.
La debilidad que detecta el BID, es que no existe un marco legal que establezca la obligatoriedad de realizar auditorías e inspecciones de seguridad vial; así también se carece de un manual/guía que recoja el procedimiento para la realización de las auditorías, así como un programa de capacitación periódico, pero si se subsanan esos aspectos podría potencializarse su eficiencia en México y en otros países.
El segundo programa mexicano considerado en el estudio del BID es el curso de formación para Auditores de Seguridad Vial que prepara a los participantes en los conocimientos técnicos y prácticos suficientes para acreditarlos como expertos en este campo y por lo tanto, como profesionales capacitados para la realización de auditorías de seguridad vial.
La debilidad que detecta el BID es la falta de un marco legal para la obligatoriedad de realizar auditorías de seguridad vial, así como el contenido y periodicidad de los programas de capacitación de auditores. El programa tampoco ha tenido la continuidad deseada, en parte por la falta de un sistema de acreditación de auditores, complementario a la capacitación.
El tercer programa es la primera etapa del proyecto iRAP (Programa Internacional de Evaluación de Carreteras) México, la cual consistió en la inspección de los casi 45 mil km de Carreteras Federales en todo el país basándose en la metodología creada por iRAP, siendo realizada por la Secretaría de Comunicaciones y Transporte (SCT), a través de la Dirección General de Servicios Técnicos.
El proyecto de iRAP utilizó las Clasificaciones por Estrellas para medir el riesgo de la infraestructura en 10% de las carreteras de la nación (un tercio de todas las vías pavimentadas). Junto con los datos de iRAP, las inspecciones están recolectando datos sobre pavimentación que se utilizarán para la gestión vial de activos. Para la realización del proyecto iRAP fue necesaria la capacitación de profesionales, para la correcta aplicación de la metodología y la utilización del software en línea de iRAP, VIDA.
La debilidad del programa es que sólo es de aplicación federal y las oportunidades que plantea el BID son: utilizar la información recogida, así como las conclusiones obtenidas, para llevar a cabo una priorización de intervenciones con el objeto de elevar el nivel de seguridad vial de las carreteras, estableciendo un calendario de actuaciones y un presupuesto. Así también, desarrollar o adaptar la metodología para su aplicación en otras redes de carreteras, de forma que se disponga de un inventario del estado de las carreteras de todo el país, desde el punto de vista de la seguridad vial.
En la siguiente entrega las experiencias exitosas en Seguridad Vial en México, en el rubro legal-institucional.
Fuente: El sol de Puebla